sábado, 1 de enero de 2022

TORRES DE LA HUERTA Alicante

Torre Sarrió, propiedad del ayuntamiento de
Alicante, visitable, recién inaugurada.
Ya he hablado en alguna ocasión de las montañas alicantinas y del hecho que posee mucho mas que ocio y playa, pues bien en esta ocasión toca algo de su patrimonio histórico cultural. 

En el siglo XVI existía entre el norte de la ciudad de Alicante y San Juan un gran terreno repleto de huertas, especialmente viñedos, regados gracias al agua procedente del pantano de Tibi (por cierto en esa época el más importante de Europa), pero el problema de estas huertas era su proximidad al mar ya que con frecuencia eran asaltados por los piratas berberiscos o los corsarios. Solían llevarse a los niños o los mas jóvenes que luego utilizaban de esclavos y a las niñas para los harenes. 

Así pues nació la idea de construir las Torres refugio entre los siglos XVI y XVII, ya que ellos eran hortelanos no soldados. Estas torres tenían unas características comunes como: la puerta pequeña, a gran altura salvada por unas pequeñas y enrevesadas escaleras, la puerta la ponían en el lado opuesto al mar, no tenían ventanas a baja altura y si había alguna muy pequeña estilo tronera. Por su planta podían ser cuadradas o rectangulares; prismáticas o troncopiramidales; con base sin plinto, con plinto o talud; con diferentes niveles; con casa adosada o sin.

En esta zona quedan unas 19 torres, todas BIEN DE INTERES CULTURAL, algunas en buen estado, otras reconstruidas, otras a punto de caerse y alguna ya demolida, en cuanto a su propiedad tambien es diversa:

Publicas: Torre Sarriò y Torre Ferrer

Privadas con uso público: Torre Reixes, Torre Bosch y Torre Castillo, todas ellas se encuentran en edificios dedicados a la restauración, de hecho la Torre Castillo es mas conocida como Torre Mauro por ubicarse allí Mauro Restaurant.

Religioso: Torre de Santa Faz ubicada en el monasterio del mismo nombre.

Privadas: el resto.



Una de las Torres mas interesantes, desde mi punto de vista y completa, es la Torre Ciprés, porque tiene una ermita que mantiene (a duras penas) el arco de medio punto de la entrada, justo delante de la puerta suelo de cantos rodados con forma espigada original, en una de las piedras de la torre aún se puede ver tallado el año de construcción, 1565. La pena, que es una de propiedad privada y la están dejando caerse.

La verdad es que la ruta superó mis expectativas, gracias  a Proyecto Terra Alicante por la organización  y a los guías de Tramuntana Aventura, que para terminar nos hicieron un regalo

Mejor final imposible, ruinas de una villa romana agrícola del siglo I a.C., excavada
totalmente y rehabilitada, 7.800 m2  de yacimiento.  Denominada  Casa Ferrer y que
se encuentra dentro del recinto del campo de golf. 


En la oficina de Turismo de Alicante os pueden facilitar folleto explicativo muy detallado con el que  realizar la visita por libre, o solicitar una visita guiada, os aseguro que merece la pena, además de aprovechar para hacer ejercicio físico, ya que el recorrido es de unos 8 km. 


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¡Nos vemos en la siguiente historia!

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